La mañana de hoy ha sido muy productiva. He tenido el honor de asistir como alumna en la masterclass que se ha dado en la escuela de canto dónde voy a tomar clases.
Ha empezado a las doce del mediodía y ha finalizado a las seis de la tarde. Raúl ha sido el pianista acompañante, ya que además trabaja en la escuela acompañando a los cantantes.
La verdad es que me ha sorprendido, no iba con unas expectativas muy altas porqué siempre creo que no estoy lo suficientemente preparada y esas cosas. He sido la tercera alumna y he cantado "Deh vieni non tardar" una aria de la ópera "La Nozze di Figaro" compuesta por W.A.Mozart. Resumiendo un poco, David me ha dicho que tengo una voz muy joven y bonita (lo primero que me ha preguntado es mi edad) y luego que tengo un gran potencial para ser una buena cantante. Sólo debo tener paciencia con la voz y dejarla crecer a su ritmo y por supuesto tener un buen profesor que me aconseje sobre como desarrollarla. A sido curioso, lo conocimos ayer por la noche en la escuela, Raúl y yo fuimos a ensayar para la clase y nos lo encontramos. Estuvimos hablando un rato y le conté que estudiaba el violonchelo sin mencionar el canto. Luego nos pusimos a estudiar y se ve que escuchó parte del ensayo. Esta mañana solo ver a Raúl le comentó que nos escuchó y que le había gustado tanto mi voz y que no sabía que además cantaba. Pues la sorpresa me la he llevado yo. No es la primera vez que alguien dice que le gusta mi voz y que tengo talento pero no me lo esperaba. Porqué viene de Inglaterra y está enseñando a verdaderos cantantes, no sé pero me ha hecho pensar.
Me cuesta muchísimo reconocer algo así, no lo puedo describir, espero coger más confianza conmigo misma. De momento mi profesora me está haciendo cantar más en público sin forzar nada, solo para que me acostumbre a la sensación. Todavía soy muy joven y mi voz es como la de un pajarillo que revolotea entre los árboles y se esconde cuando hay lluvia.
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