Siento que han pasado miles de años desde que dejé de escribir... y quizás no voy tan equivocada...
Durante mi ausencia han ocurrido cambios existenciales que todavía me cuesta asumir.
El único consuelo es que ahora soy un poquito más feliz que antes, o quizás los momentos de luz me compensan por las tormentas.
Solamente espero volver pronto, bajar de la nube y sumergirme en el teclado.
Un abrazo a todos.
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