The Swan

Una de sus transformaciones Cómo lo hacen

ADVERTÉNCIA ANTES DE LEER EL ARTÍCULO: No recomendado para personas muy sensibles. En la misma línea de programación televisiva tuvimos la oportunidad de ver el programa americano "The Swan" (el cisne). Básicamente se trata de transformar a mujeres normales en mujeres "bellisísimas" mediante la cirugía estética, régimen, gimnasio y una pequeña terápia psicológica para estar listas para afrontar los cambios de su cuerpo. Unos cientos de mujeres insatisfechas con su imágen quieren presentarse al programa, solo una docena es seleccionada para la transformación. Todas las mujeres seleccionadas tienen un problema común que no es físico, es psicológico. En el caso de Beth, una chica de aproximadamente 23 años casada y con un hijo decidió presentarse debido a que dejó de resultar atractiva a su marido y éste se besó con otra mujer. Esto le ocasionó un gran trauma y en vez de hablar con su marido o dejarlo obtuvo una falsa esperanza en su matrimonio entrando en el programa. ¿Realmente era ese el problema que tenía su marido? ¿O simplemente le apetecía la variedad y eso le sirvió de exsusa para justificarse haciendo a su vez sentir culpable a su vulnerable mujer? Las mujeres entran en el programa de dos en dos, viven separadas de sus familias y no pueden tener espejos ni reflejos en los que verse durante tres meses. La razón que ellos ofrecen para justificar la ausencia de espejos es que la recuperación es más rápida al no tener que contemplar los cambios paulatinos que se producen durante el camino. En realidad no pueden mirarse porque si se vieran después de ser operadas quizás les cogería un ataque al corazón. Tras ser operadas sus caras y figuras son tan horribles que parecen haber sufrido un accidente. No sólo el aspecto es terrorífico sino el dolor y sufrimiento que les provoca la cirugía intensiva, todo el cuerpo debe repararse "para alcanzar la máxima belleza femenina que llevan dentro". Pero la tortura no empieza aquí, antes las examinan euxhastivamente para operarlas diciéndolas lo poco femeninas que son sus figuras y que quitando de aquí, hinchando de allá y cortando de allí lograrán ser unas mujeres atractivas, seguras de si mismas, dispuestas a comerse el mundo (la solución a sus problemas de autoestima...). Controlan su peso diáriamnete por que todas, inlcuso las muy delgadas, son sometidas a un régimen de 1300 kcal. Cuando están algo recuperadas de los mil y un retoques las meten en el gimnasio dos horas diarias. La terapia es un lavado de cerebro para convencerlas de que para ser bella hay que sufrir, y digo yo, ¿no es mejor ser una bestia y vivir feliz alejados de la gran presión que supone ser "bello" internacionalente? ¿Para ser guapo/a hay que operarse porque la madre naturaleza no nos lo proporciona? No me lo creo, no lo comparto, no lo quiero y por lo tanto lo denuncio, es un atentado contra la sanidad mental y física de las personas y además una infravaloración de la naturaleza bella por sí misma. Después de los tres meses salen por la televisión totalmente cambiadas y por primera vez se ven reflejadas en el espejo, la sorpresa es muy grande y todas están contentas de su cambio, "ahora son unas mujeres bellas y todos los hombres caerán a sus pies hipnotizados". El concurso escoge a una de esas dos para participar en el desfile final en el cual se escogerá "la cisne". Basan la elección en el grado de cambio logrado y su capacidad de lucha para conseguirlo. En el desfile final se reúnen las finalistas, después de ser entrenadas para pasearse, y se escoge el animalito más bonito. Aquí tenéis una foto de la que fue ganadora, obtuvo el premio a la belleza y a su vez el fin de un matrimonio de ocho años. Me indigna este programa y todo lo que representa, supongo porque he sido víctima de la obsesión del ser "bella" y he pagado su precio, de hecho lo estoy pagando. Recomiendo leer la página web, no es la oficial porque en estos momentos el programa no se emite, es un artículo de crítica.